¡Feliz cumpleaños, señor papá! ^-^

Cuando tenia cuatro años mi papá me enseño que los relámpagos de los días tormentosos eran solamente "el flash" que utilizaba Dios para tomar imágenes desde el cielo, y que eran muy luminosos por que la tierra era demasiado grande y muchas las personas que vivían en ella. Ese día deje de temer a las tormentas eléctricas porque creí en sus palabras; aun hoy, en la actualidad durante aquellos días de lluvia suelo mirar al cielo y recordar las palabras de mi padre y me remontan casi mágicamente aquella lluviosas noche en que él me dijo esa teoría. Quizá esa sea la razón por la que me gustan los días nublados.

Me resulta extraño ver a mi papá de lunes a viernes, acostumbrada desde pequeña a buscar su presencia únicamente los fines de semanas, por lo que las vacaciones, cuando él esta en casa me parecen excepcionales. Su trabajo, desde hace años lo lleva casi siempre fuera de la ciudad. A pesar de todo, siempre ha estado allí cuando lo he necesitado.

De él he aprendido muchas cosas, imposibles enumerarlas o mencionarlas todas en un solo post, pero me agrada pensar que todo lo que soy ahora ha sido en muchos aspectos gracias a él y su dedicación y es por eso que siempre he dicho que no cambiaría nada de la vida que me toco por suerte. De vez en cuando me gustaría que pudiera estar más tiempo con nosotros, en familia, menos tiempo viajando, pero eso no es una opción cuando trabajas en una empresa donde tú eres sólo uno más del engranaje.

Hemos tenido de todo, no nos sobra nada, pero tampoco no ha faltado algo, y en este camino que hemos recorrido como familia hemos conocido ciudades y gente que nunca olvidaremos, amigos eternos y pueblos con los que soñamos un día poder volver. Son esos pequeños lugares donde hemos vivido los que han forjado nuestras identidades, lo que hoy somos y esos mismos paraísos han sido testigos silenciosos de lo mucho que hemos vivido y todo esto a sido gracias a mi papá.

• Él me enseño a apreciar las cosas cotidianas, como ver pasar el tren de la cinco de la tarde todo los días cuando aun era una pequeñita.

• Me enseño a andar en bicicleta y a patinar (aunque el no sabia patinar).

• Me enseño a tener paciencia, que las cosas no siempre llegan cuando uno quiere sino a su debido tiempo.

• Me enseño a ser agradecido con lo que tengo, por que no todos tiene la misma suerte.

• De él aprendí a ser responsable y honesta con lo que haga.

• Me acompaño en mi primer día en la escuela secundaria y a encontrarle valor a las fotografías, esos instantes congelados en el tiempo para la posteridad.

• Me enseño a apreciar cada año de vida como un verdadero tesoro.

En fin, podría extenderme hasta el infinito. Nunca podré agradecer todo lo que me ha dado en estos años que yo llevo de vida.

Se que tal vez nunca lea esto pero: "Papá...¡Muchas gracias por estar allí!"